Julio

La gaviota en lo alto mira a T.  que quiere dormirse pegado al pecho de su madre, mientras tanto, a los pies del quiosco de la música tres amigas se ponen al día de sus alegrías y sus penas. Una de ellas aún fresca de los baños en la piscina de áquel extraño hotel lleno de rusos y de alemanes, ese extraño hotel dónde tuvo tiempo de usar todos los emoticonos del nuevo teléfono, enviarlos a la habitación de al lado y oir las risas ajenas a través de la pared. 

A la vuelta, el asfalto de la gran ciudad ardía de calor y de indignación.

Una vez en casa se tuvo que encerrar porque una gastroenteritis tremenda la atacó sin darle tregua y ahora se aburre y piensa que en cuanto sane va a ir a dar paseos a la playa, a correr y nadar, va a ir a todas las meriendas y picnics al aire libre que pueda, va a cocinar cosas ricas para sus amigos y amigas, va a estudiar mucho y sacar muy buenas notas en septiembre, va a ir de excursión al monte los días que no haga mucho calor...trarlaralaralara!

Banda Sonora:

Olafur Arnalds